lunes, 21 de noviembre de 2011

Un día de furia.

Lunes21 de noviembre.

6.45: Suena el despertador…demasiado temprano para mi gusto, pero había que hacer trámites, y como dice Mirtha, "el tiempo es tirano".

7.30: Me subo a un taxi para ir al Banco de Córdoba a pagar un timbrado con las timbradoras automáticas (porque los cajeros humanos trabajan a reglamento o algo así).

8.00. llego al Banco, que estaba cerrado (los vagos ahora abren 8:30, pero la timbradora estaba en otra área…ingreso, dejo todas las cosas sobre el mueble. CARTEL: Por el Horario, sólo se aceptan timbrados con débito automático: NO TENGO TARJETA. Cuando se es pobre, no se tiene débito. Pienso: cuando abre el banco, modifican este sistema inservible, y listo...

8.30: luego de media hora de espera, ingreso nuevamente. El cartel continúa firme junto al cajero, entro al Banco, hay otra timbradora que si aceptaba efectivo. Cargo los datos, y me devuelve mensaje de ERROR. Consulto…no funciona! Típico del Banco de Córdoba... no funciona nada.

8.40: Voy a otra sucursal del banco, pero como está a 4 cuadras, deciden abrir a las 9.

8.55: El seguridad avisa que el Banco iba a abrir más tarde, porque seguramente, los empleados debían desayunar sus criollos...

9.00: Llego otra sucursal del Banco de Córdoba, 30 personas haciendo cola,el empleado brillaba (?) por su ausencia.

9.10: Ingreso al primer Banco nuevamente, hablo con la guardia de seguridad, con el personal de informes, pero no me creen, comprueban ellos mismos que la timbradora no funciona, me piden el dinero, hablan con el cajero para que haga la excepción y me cobra. UNA BUENA!

9.15: Llego al Ministerio de Trabajo, apoyo la documentación sobre un banco para pegarle el timbrado que había pagado. Saco la plasticola: ESTABA SECA!!!!!!!!!! El Sr. De la fotocopiadora, me presta. Le agarró un ataque de amabilidad, porque ese buen hombre suele ser muy odioso!

9.20: llego a la ventanilla. CARTEL: NO HAY MÁS NÚMEROS. Hablo con el encargado, solamente necesitaba un sello, un miserable sello, y como es un Sr. muy comprensivo, me dijo muy amablemente: Vení mañana a las 7.00 y te ponemos el sello!

9.40: Llego a la oficina, me miran con mala cara porque el Boss no recordaba que estaba haciendo otro trámite.

10.00: Hablo con un cliente por una audiencia: PERDIO APROX. 10 F931 pagos…qué le llevo a la audiencia?????????? Me dice: imprimí los pagos de AFIP.

11.00 a 13.00: intento imprimir los pagos, la página de cae, reingreso, no podía imprimir… Para mi que la gente de sistemas de AFIP se divierte con los contadores, al hacer una página tan pedorra.

13.00: ingreso a la página del ministerio para imprimir timbrados…no funcionaba, no me hacía caso! Durante 20 minutos estuve intentando y logré que hiciera lo que yo pedía.

13.30: imprimo formularios…cuando los busco, estaba mal configurada la impresora: NO SIRVIO NINGUNO!!! Pérdida de tiempo por 500.

14.00 Salgo del estudio rumbo al Banco para abonar los timbrados: EL BANCO SE MUDO! y lo peor de todo, no indicaba hacia donde ¬¬

14.05: Encuentro otra sucursal. Pago los 2 primeros timbrados. Los otros 6 estaban VENCIDOS. Se puede ser tan boluda????

14.30 Llego a la oficina. De camino me compro un sándwich para almorzar. Cuando me ven llegar, me piden que les vaya a comprar el almuerzo (más sandwichs)porque no habían almorzado. Camino 3 cuadras, realizo la compra, pido café y solamente tenían saquitos. Los compro. Salgo del kiosco y recuerdo que el hermano del Boss dejo la pava en el fuego y se fundió (entiéndase tiene un agujero), por lo tanto, no habrá café.

15.30: me piden un par de informes de construcción para una licitación sobre los cuáles no tengo ni idea.

16.00: No funciona el sistema de sueldos. Me cobran $100 Para cambiarle un número…un chanta, como el 90% de los que hacen sistemas, pero bueh…no quedaba otra.

17.15: me voy de la oficina. Llego a la esquina y pasa el bondi…media hora hasta que llegara otro.

Un día demasiado largo... por suerte, a mi no me pasó. #FuerzaVicky!

viernes, 4 de noviembre de 2011

Buenos Aires, de nuevo.

Siempre me gustó Buenos Aires, tenía buenas (o malas) excusas para ir, y disfrutaba de mis largas caminatas. Me atrevo a decir que conozco mejor CABA que Córdoba (donde no se los nombres de las calles a 5 cuadras de mi casa), me manejo bien en subtes y colectivos (para todo lo demás, uso la GuiaT), y puedo asegurar que debo ser la única persona que vuelve con más monedas de las que llevó (no se porque, pero siempre me dan vueltos en monedas, y tengo testigos que pueden acreditar esto).
Durante un tiempo, suspendí mis viajes a porteñolandia, pero este año los tuve que retomar obligadamente. Los estaba disfrutando, como siempre... pero esta semana, fue diferente. Al segundo día de estar, al tener los resultados que fui a buscar, me di cuenta que no tengo ganas de volver, al menos, no para eso. Ya se como va a seguir, me voy a sentir peor que como me sentí este lunes, y mi cabeza va a pensar en eso todo el tiempo. Será que no me quise resignar a otras posibilidades, pero a veces, es mejor dejar de intentar, y que las cosas se den solitas con el tiempo.
Ya falta menos para que termine el año, y el año que viene, no creo volver al oftalmólogo.